Llanto
El llanto me invade mirándote
estas más distante que presente.
No puedo llegar a tu corazón
me has olvidado amor mío.
Llanto por no tenerte en mis brazos,
llanto por no besar tus labios,
llanto por no rozar tus cabellos,
llanto porque la vida se me agota.
Y no te importa, alondra mía.
Infancia mía
Las historias del abuelo
Se han ido entre lágrimas, y cantos.
Las mariposas del atardecer
Juegan en rosas del ayer.
Te fuiste
Infancia mía, soy un fragmentos de tus días.
Nuestro divorcio
Aquella mañana, Sol descubría que los mareos continuos, el dolor de sus pezones y el ensanchamiento de sus caderas, no era una simple coincidencia. Estaba embarazada, y no era el mejor momento, José Arturo deseaba el divorcio ante un matrimonio que no funcionaba desde hace un año. Dejo de amarla cuando se replanteo que el amor era más que sexo, y que sus sueños no eran los mismos. Esa noche se sentó en la mesa, y descubrió que ella tenía una sorpresa para él, y la quiso escuchar. Sol le contó que estaba embarazada, y pronto oiría la palabra papá. Eso lo alegro profundamente, pero sus sentimientos hacia ella ya no estaban, y le pidió el divorcio. De los ojos de Sol salieron tantas lágrimas, y le pidió que se fuera, el divorcio se haría. Ayer dio a luz a una hermosa niña, él pidió perdón, y de ella no había amor.
Imagen de cabecera: www.culturapopular.com
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